En un principio cuando nacio la tierra y antes de que el hombre fuera preconcebido, existia la palabra de la creacion. Era esencia fundamental de todo aquello que venia creciendo, como anterior a ese paraiso que no le falto el suspiro y la calidez del viento. Era para el espectador el espejo lacustre que lo devolvia en las ansias y le dibujaba suenos. Adaptandolo a ese mundo semejante y fresco, que lo retrata y lo amalgamaban. Algo que era sinonimo de su sorpresa, porque seguimos unido ese limo con que el que diseno nuestra forma, sustrato de ese mar, supeditado a la temperatura de un...
En un principio cuando nacio la tierra y antes de que el hombre fuera preconcebido, existia la palabra de la creacion. Era esencia fundamental de todo...