El problema de la desafección política ha sido habitualmente asociado a la apatía de los individuos. Sin embargo, eso no es más que un epifenómeno. La cuestión que debería llamar la atención es que la ciudadanía constata la marginalidad de su posición en el entramado político en un momento en el que las transformaciones sociales han impulsado la autonomía y la implicación del individuo en su entorno de forma sustantiva. Por eso sería un error concluir que los individuos no sienten vinculación alguna con la cosa pública, aunque no voten, ni tan siquiera estén satisfechos con...
El problema de la desafección política ha sido habitualmente asociado a la apatía de los individuos. Sin embargo, eso no es más que un epifenómen...