Toda infancia tiene algo de irrepetible y heroico. Sol, aceras. Calles anchas, sin coches. Estan aqui desde antiguo. Y seguiran aqui siempre. Todo es misterioso, real, incomprensible. La gente te habla y te sonrie. Tu no los entiendes. Ellos no cambian, no crecen, no mueren. Y tu seras asi siempre, sin horizontes adultos en la eternidad de tu vida de nino."

Haz trekking por la Costa da Morte o el Camino del Inca. Pedalea a la aventura durante mes y medio por Espana. Viaja en autocaravana al desierto de Marruecos y a las brumas del Cabo Norte. La magia de estos relatos hace que sigamos los pasos del autor como si realmente lo hubieramos vivido."

Existe una fina linea invisible que une Escocia y Egipto, del mismo modo que hay otra que va de las republicas balticas a la frontera de Iran. Visto a traves de los ojos de estos dos infatigables viajeros, el mundo se vuelve un sitio que merece la pena descubrir y conocer.

El centro del mundo es donde uno vive. Nos creemos que esta donde pasamos la infancia, en la familia, en los recuerdos. Pero no es cierto, porque todo eso lo llevamos con nosotros, como un equipaje. Lo unico que hacemos al volver donde nacimos es convencernos de que esas historias fueron reales y no un sueno, porque somos unos sentimentales del carajo y aqui, en la vida, casi todos necesitamos asideros. Veinticinco relatos que son otras tantas indagaciones por los entresijos del alma humana."

Desde las abruptas Hurdes a las soledades de La Serena. De las fertiles vegas del Guadiana al Portugal incognito. En 30 rutas y casi 5.000 kilometros, con mas de trescientas localidades visitadas, este libro es una sintesis de naturaleza, historia, pueblos y gentes de la region mejor conservada de Europa Occidental. Una forma diferente de conocer Extremadura"

Este libro es el diario de un viaje en autocaravana a traves de Nueva Zelanda, realizado durante julio y agosto de 2016. Paso a paso, el autor nos sumerge en el magico mundo del Pais de la Nube Blanca. Hay un momento en todo viaje en que uno flota en una especie de ingravidez no fisica, pero si mental: llevas tanto tiempo fuera de casa que ya ni recuerdas como empezo todo. Deja de preocuparte lo que te queda por delante o lo que dejas irremisiblemente atras. Disfrutas de un instante que no tiene parangon ni ramificaciones futuras. Es lo mas parecido a la dicha que he podido encontrar; aunque...