ISBN-13: 9783848450190 / Hiszpański / Miękka / 2013 / 264 str.
Estudiamos las poblaciones de Murchas y Lojuela del Valle de Lecrin (Granada)a traves de los documentos de bienes habices y Libros de Apeo y repartimiento de suertes confeccionados tras la expulsion de los moriscos. Gracias a estas fuentes hemos podido conocer como eran cada una de las poblaciones de la comarca. Las fuentes consultadas y la toponimia nos han llevado a la etapa nazari, tierras que tras la conquista cristiana sufrieron algunos cambios administrativos y religiosos. El conocimiento de los bienes habices de las mezquitas, rabitas, fuentes, caminos, pobres, etc., nos permiten ver como la corona castellana se convirtio en propietaria de un elevado numero de bienes y dono parte de los mismos a las iglesias. La relacion de bienes habices se remonta a 1502 tras la conversion de los mudejares al cristianismo. Mas adelante estos bienes quedaron recogidos por las iglesias para controlarlos y lograr mediante arrendamientos obtener beneficios economicos con los que hacer frente a las necesidades del culto."
Estudiamos las poblaciones de Murchas y Lojuela del Valle de Lecrín (Granada)a través de los documentos de bienes habices y Libros de Apeo y repartimiento de suertes confeccionados tras la expulsión de los moriscos. Gracias a estas fuentes hemos podido conocer cómo eran cada una de las poblaciones de la comarca. Las fuentes consultadas y la toponimia nos han llevado a la etapa nazarí, tierras que tras la conquista cristiana sufrieron algunos cambios administrativos y religiosos. El conocimiento de los bienes habices de las mezquitas, rábitas, fuentes, caminos, pobres, etc., nos permiten ver cómo la corona castellana se convirtió en propietaria de un elevado número de bienes y donó parte de los mismos a las iglesias. La relación de bienes habices se remonta a 1502 tras la conversión de los mudéjares al cristianismo. Más adelante estos bienes quedaron recogidos por las iglesias para controlarlos y lograr mediante arrendamientos obtener beneficios económicos con los que hacer frente a las necesidades del culto.