ISBN-13: 9783846577233 / Hiszpański / Miękka / 2011 / 212 str.
En este trabajo se evalua la respuesta del suelo tras el fuego en situaciones tipicas de muchas zonas mediterraneas, abarcando ambientes semiaridos, secos y subhumedos. Se han utilizado diferentes escalas de trabajo, desde la microparcela a la ladera, pasando por estudios bajo condiciones controladas en el laboratorio. Entre otros factores, se ha analizado el efecto del tipo de suelo, la orientacion, la respuesta de la vegetacion, la virulencia del fuego y el uso del suelo. Entre los resultados obtenidos destacan los siguientes: Se observo un incremento generalizado de las producciones de escorrentia y sedimentos durante el periodo posterior al fuego. Los resultados indican que estos incrementos estuvieron asociados a un sellado de la superficie del suelo debido al impacto de las gotas de lluvia. Este fenomeno puede ocurrir incluso en suelos con una estabilidad estructural elevada. La respuesta de la vegetacion fue un factor fundamental de control de la degradacion posterior al fuego. Se mostraron especialmente vulnerables al fuego los suelos desarrollados sobre margas y coluvios margo-calizos, asi como las comunidades vegetales dominadas por especies incapaces de rebrotar."
En este trabajo se evalúa la respuesta del suelo tras el fuego en situaciones típicas de muchas zonas mediterráneas, abarcando ambientes semiáridos, secos y subhúmedos. Se han utilizado diferentes escalas de trabajo, desde la microparcela a la ladera, pasando por estudios bajo condiciones controladas en el laboratorio. Entre otros factores, se ha analizado el efecto del tipo de suelo, la orientación, la respuesta de la vegetación, la virulencia del fuego y el uso del suelo. Entre los resultados obtenidos destacan los siguientes: Se observó un incremento generalizado de las producciones de escorrentía y sedimentos durante el periodo posterior al fuego. Los resultados indican que estos incrementos estuvieron asociados a un sellado de la superficie del suelo debido al impacto de las gotas de lluvia. Este fenómeno puede ocurrir incluso en suelos con una estabilidad estructural elevada. La respuesta de la vegetación fue un factor fundamental de control de la degradación posterior al fuego. Se mostraron especialmente vulnerables al fuego los suelos desarrollados sobre margas y coluvios margo-calizos, así como las comunidades vegetales dominadas por especies incapaces de rebrotar.