ISBN-13: 9783846568309 / Hiszpański / Miękka / 2011 / 232 str.
La Internacional Comunista dirigida por Willi Munzenberg, de 1919 a 1940, oriento sutilemente a los intelectuales, a un nivel desconocido hasta entonces, hacia la esfera sovietica. El deseo de una utopia que superase los viejos valores fue el arma que le daria su control. La solidaridad, los deseos de paz y la oposicion a la guerra y al fascismo fueron utilizados para que los inocentes trabajasen en aras de los intereses de la Union Sovietica. Esta situacion propicio que, en plena Guerra Fria, los Servicios de Inteligencia estadounidenses y britanicos desarrolaran una campana secreta de propaganda politica y cultural. La clave de boveda, para ganar la batalla de las conciencias, fue el Congreso por la Libertad Cultural, en su esfuerzo por contener la influencia sovietica sobre la Europa de la segunda postguerra terminaron creando una ideologia politica gracias a un gran numero de intelectuales, provenientes muchos de ellos de la propia Internacional Comunista, cuya ala mas dura terminara conformando el movimiento Neoconservador.
La Internacional Comunista dirigida por Willi Münzenberg, de 1919 a 1940, orientó sutilemente a los intelectuales, a un nivel desconocido hasta entonces, hacía la esfera sovietica. El deseo de una utopía que superase los viejos valores fué el arma que le daría su control. La solidaridad, los deseos de paz y la oposición a la guerra y al fascismo fueron utilizados para que los inocentes trabajasen en aras de los intereses de la Unión Sovietica. Esta situación propició que, en plena Guerra Fría, los Servicios de Inteligencia estadounidenses y británicos desarrolarán una campaña secreta de propaganda política y cultural. La clave de bóveda, para ganar la batalla de las conciencias, fué el Congreso por la Libertad Cultural, en su esfuerzo por contener la influencia sovietica sobre la Europa de la segunda postguerra terminaron creando una ideología política gracias a un gran número de intelectuales, provenientes muchos de ellos de la propia Internacional Comunista, cuya ala más dura terminará conformando el movimiento Neoconservador.