ISBN-13: 9781475248623 / Hiszpański / Miękka / 2012 / 264 str.
ISBN-13: 9781475248623 / Hiszpański / Miękka / 2012 / 264 str.
A lo largo de mi vida, ya son muchas las ocasiones en las que he dicho que la practica de la medicina no se diferencia de la de cualquier otra profesion u ocupacion. Todas las actividades que desarrollamos los seres humanos son necesarias; desde la aparentemente mas sencilla, hasta la mas compleja. Imaginemos un mundo sin -por ejemplo- empleados de banca. Aun con la moderna tecnica, siempre debe existir alguien que cumpla las funciones precisas para la realizacion de las transacciones dinerarias. Incluso con la magica Internet, hay necesidad de diligentes operarios. Como la senalada, podriamos seguir enumerando profesiones y tareas que son absolutamente necesarias para que una sociedad funcione, tal y como la entendemos nosotros. Pero naturalmente, esos trabajos deben hacerse bien. Esto es ciertamente lo unico que se puede exigir a quien la desarrolla: que haga bien su labor. Porque cualquier trabajo, si esta mal hecho, va a generar problemas que tendran un alcance determinado. Calles sucias, cortocircuitos, incomunicacion telefonica, accidentes de trafico, derrumbamiento de edificios, aparicion de epidemias, golpes de estado, genocidios, etc.... son hechos que pueden suceder por que alguien ha desempenado mal su obligacion. Sin embargo, parece ser que la medicina es una de las profesiones mas trascendentes. Quiza sea por el objetivo de la ocupacion: la cura, el cuidado, de la salud de la persona. Fuera de eso, todo es igual. Se colige de lo anterior que a un profesional de la medicina unicamente se le puede exigir, ni mas ni menos, que trabaje bien; que se esfuerce dia a dia en alcanzar la perfeccion, aunque esta sea una meta inalcanzable. Ejercer con eficacia una ocupacion no es nada dificil. Solamente se necesitan tres circunstancias o condiciones: 1.- Conocer como se hace. 2.- Tener ganas, intencion de hacerlo bien. 3.- Tener sensatez y buen juicio. Reconozcamos que son tres cosas que, en teoria, deberian estar presentes en las personas que desarrollan cualquier ocupacion y que, con su aplicacion a la resolucion de los problemas que vayan apareciendo, es ciertamente extrano que tras la conclusion del encargo, haya reclamaciones o protestas. La primera de esas cosas se adquiere y mantiene por el estudio continuo y la experiencia, que se va acumulando. La segunda, se supone, como sucedia con el valor en el ya pasado y obligatorio servicio militar. En el glorioso Cuerpo de Infanteria de Marina, en mi caso. Inolvidable. Y la tercera? Como hacer para ser prudente?"